Alzheimer y salud bucodental: ¿están relacionadas?
La enfermedad del Alzheimer es una de las enfermedades neurodegenerativas más comunes entre la población de la tercera edad. Consiste en el atrofiamiento y muerte neuronal, y sus síntomas aparecen lentamente, afectando a las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje. Actualmente, el Alzheimer afecta a más de 50 millones de personas en el mundo, pero sus causas y origen siguen siendo una incógnita para la ciencia.
Aunque no existe una causa determinada sobre la aparición del Alzheimer, sí que se han descubierto factores de riesgo en los últimos años. Uno de estos agentes activadores es padecer afecciones orales, principalmente infecciones gingivales.
Las enfermedades en las encías ya se han visto relacionadas con otras patologías, como la salud cardiovascular. En el caso del deterioro cognitivo, muchos estudios han descubierto que el “Porphyromonas gingivalis”, es decir, el patógeno que provoca la gingivitis, habita en el cerebro de pacientes con Alzheimer.
Esta bacteria es causante del caño cerebral, ya que excreta una enzima que genera la destrucción de neuronas con la consecuencia pérdida de memoria.
¿Cómo detectar una enfermedad gingival?
Las encías sanas son firmes y de color rosa pálido, y están bien sujetadas alrededor de los dientes. Cuando aparece la gingivitis trae consigo los siguientes síntomas:
- Encías más inflamadas o hinchadas de lo normal
- Encías de color oscuro
- Sangrado fácil durante el cepillado
- Mal aliento
- Encías sensibles y retraídas
¿Qué pautas debemos mantener?
Asegúrate de cepillarte los dientes mínimo dos veces al día y usar hilo dental. Es recomendable utilizar un cepillo con cerdas suaves para que no dañe las encías.
Cepíllate durante al menos dos minutos con movimientos cortos hacia adelante y hacia atrás, y hacia arriba y abajo.
Reemplaza el cepillo de dientes cada tres meses o cuando las cerdas estén deshilachándose.
¡Muy importante!
Añade suplementos vitamínicos como la vitamina C en tableta, o bien de manera natural comiendo alimentos como cítricos, brócoli, coliflor, tomares y coles de Bruselas.
Utiliza un enjuague bucal para eliminar las bacterias dañinas y la placa de las encías. Un irrigador bucal hará que se eliminen las partículas de alimentos y bacterias de la placa gracias a su chorro de agua que sale por la línea de las encías y entre los dientes.
Prevención: el camino correcto a seguir
El correcto cepillado de los dientes y la utilización de hilo dental es una buena forma para evitar infecciones. Sin embargo, si existen antecedentes familiares con esta enfermedad, es imprescindible realizar mayores controles. En Clínica Dental Peñalver estaremos encantados de atenderte